Mercedes Slk

Fabricante: Maisto

Escala: 1:18

Autor: José Francisco



Siempre hay quien alega que personalizar un vehículo de alta gama con componentes de vehículos inferiores, incluso simplemente tunear un vehículo de “x” marcas, es sacrilegio. El arte tuner a escala, permite lanzar esa magia de interconexión neuronales con motivación Tuning, esas locuras transitorias que permite el no poseer esas líneas de gran coste para concederle esa evolución que somos capaces de concederles, el color Tuning que se adapta a todo lo que posea 4 ruedas. Ello no conlleva que si la fortuna nos sonríe y posees fortuna monetaria, fijo que lo harías en 1:1, digan lo que digan.

José Francisco le concede ese color camaleónico como el aplicado en tonos morados a negro, sobre una réplica 1:18 de Maisto basado en un Mercedes Slk 230.

La faz de este de Mercedes luce como todo gran proyecto un cambio de ópticas, siendo las implantadas las procedentes de un Citroën Xsara, moldeando artesanalmente sus aledaños. El capó fué modificado acompasándose a las nuevas formas, como las aletas ensanchadas en su totalidad mientras llega a través del monoblock a la defensa artesanal, con gran canteado en perímetro de ópticas. Ésta porta tres grandes aperturas con antinieblas incorporados y acaparando el espacio donde antes se ubica la calandra.

El lateral es imponente, con alisamiento previo para recibir la magnitud de los ensanches intercomunicados por el monoblock, donde las taloneras artesanales sobredimensionadas, se aderezan con un gran lip en ellas. En los pasos de rueda destacan las inmensas llantas multiradio rojas con garganta pulida, mientras el protagonismo lo porta la apertura vertical de puertas.

La zaga es el punto de llegada de la artesanía aplicada en aletas y portón trasero, donde se ha extendido en vertical hasta parecer un targa al estilo del Crx Del Sol. Sobre el mencionado portón alisado se ubica un alerón inmenso de gran ala, en carbono rojo en plano horizontal y verticales sobre su base negra.

Los pilotos traseros fueron modificados entre otras cosas, ser desprovistos de la tulipa, para ceder el paso a la defensa totalmente alisada y redondeada. Una conversión camaleónica para una base de gente adinerada, donde el habitáculo a la vista como buen descapotable, donde se aprecia réplica de baquets Recaro, pintados en blanco y con detalles en rojo. El habitáculo combina el rojo portado en las llantas con el blanco impoluto. Como aderezo final, extintor en la consola central baja.